La Declaración de Shenzhen subraya la importancia de los mediadores en el ámbito digital

Las redes sociales transformarán la relación entre escritores y lectores.

Se abre la posibilidad de un nuevo tipo de edición interactiva y de crowdfunding en el campo del libro, gracias a la colaboración entre lectores y autores.

Internet ha cambiado las reglas del juego y es un nuevo espacio de lectura en el que los lectores son multimediales y en cuyo ámbito la actividad lectora es más que nunca un acto de comunicación.

Gracias al trabajo de los mediadores, tanto la biblioteca como la escuela pueden convertirse en hubs para la creación y difusión de contenido.

El libro puede convertirse en un servicio y el cloud computing incrementará la dimensión, velocidad y variedad de los servicios que las bibliotecas pueden ofrecer.

Lo digital puede proporcionar un mayor grado de personalización. Es posible contemplar a los autores como emprendedores capaces de hacer marketing de su contenido gracias a los instrumentos para la interacción con los lectores.

La tecnología digital ofrece instrumentos para hacer grandes economías en los procesos y optimización en la utilización de los recursos de la industria editorial.

La aplicación de las herramientas de Big Data permiten definir con una mayor precisión las necesidades de los lectores, lo cual ha de permitir una oferta más inteligente y personalizada.

Los últimos avances tecnológicos van a mejorar la eficacia de los esfuerzos antipiratería. 

La Declaración de Shenzhen subraya la importancia de los mediadores en el ámbito digital